Mezclamos e integramos el almidón de maíz, las harinas de arroz y de trigo sarraceno, el psyllium y la goma xantana. Añadimos una pizca de sal. Volcamos sobre una superficie y hacemos un volcán con un cráter en el centro, bien grande, donde añadiremos el huevo batido, el agua y el aceite. Con un dedo removemos en círculos de dentro hacia fuera, despacito, incorporando la harina de los lados poco a poco y teniendo cuidado y evitando que el líquido se escape. Vamos formando la masa, con las manos espolvoreadas de harina de arroz, hasta que consigamos una masa homogénea apretando con las manos la masa y amasando la pasta con la palma de la mano. Si la consistencia de la masa es demasiado seca, rociamos con un poco de agua templada, si en cambio es húmeda, añadimos algo mas de harina de arroz. Es preferible que quede húmeda, porque es más difícil rehidratar una masa seca que al revés. Hacemos una bola con la masa y dejamos que repose envuelta en film durante 30 minutos.

Mezclamos en un cuenco la calabaza cocida, las nueces picadas, el queso y reservamos.

Estiramos la masa en una superficie con un rodillo o con una máquina de pasta, hasta conseguir una lámina fina de uno o dos milímetros de grosor. Vamos poco a poco, dándole la vuelta y girando la masa. Si la masa se pega a la superficie o al rodillo espolvoreamos con un poquito de harina de arroz. Cortamos con un corta pastas las pie- zas para los ravioli. En el centro ponemos un poco del relleno y con el dedo mojamos con un poquito de agua los bordes, para que al poner la segunda pieza encima, consigamos sellar los bordes y evitar que se abran al cocer. No aplastemos por el centro, dejando que los ravioli queden abombados, y evitando que el relleno asome.

Cocemos en agua hirviendo durante 5 minutos y añadimos una buena salsa al gusto. Ya tenemos listos nuestros ravioli sin gluten. ¡A disfrutar! ¡Cocina sano, cocina con Pepo!

Gracias a el El Espíritu del Bosque, Escuela 100% Gluten free por facilitarnos esta estupenda receta.