Pelamos la zanahoria y cortamos finamente en brunoise (cuadraditos) y reservamos.

Extendemos la masa brick y cortamos en láminas rectangulares de unos 8 cm de ancho por 15 cm de largo, dependiendo del tamaño final que queramos darle a nuestros triángulos. Pintamos con la clara de huevo la parte externa de la lámina brick y le damos la vuelta.

Colocamos encima en la parte de abajo el solomillo pincelado con la reducción de vinagre balsámico, ponemos encima las hojas de espinacas y la zanahoria picada. Y vamos plegando la masa con el relleno, en triángulos, siempre buscando la linea recta. Añadimos el sésamo por encima y metemos en la bandeja del horno pre-calentado a 180o durante 10 minutos.

¡Y listo!

Ya tenemos preparado un plato sano, nutritivo y muy rico. ¡A disfrutar!